domingo, 26 de septiembre de 2010

La microempresa “Divino Chocoland”, formada por una familia, inició con una inversión de 10 mil dólares

“Cuando tenemos pedidos para acontecimientos sociales, toda la familia –desde mis papás hasta mis hermanas– trabajamos”
María Senzano | Empresaria



Con una inversión inicial de 10 mil dólares en implementos de chocolatería, infraestructura, importación de dos fuentes de chocolate y la construcción de un vehículo de distribución con imágenes infantiles, la empresa familiar “Divino Chocoland” nació hace cuatro años para atender la demanda de cumpleaños de niños, bautizos, fiestas de 15 años, matrimonios y todo tipo de acontecimientos sociales.

La novedad de las fuentes de chocolate, las brochetas de frutas, las paletas de todo tamaño y color y los bombones rellenos con cremas, licores y cereales rebasaron los eventos sociales y empezaron a ser demandados por niños, jóvenes y adultos en la ciudad, explica la gerente de la empresa, María Cristina Senzano.

En procura de satisfacer la demanda cada vez más creciente de sus productos, “Divino Chocoland” empezó a circular hace tres años por puntos de mayor concentración de gente como plazas y parques en los atractivos “carritos Chocoland” ofreciendo chocolate en diferentes formas y modalidades.

Especialidad

Después de mejorar sus conocimientos sobre el arte de fundir cacao, materia prima del chocolate que adquieren a la empresa industrial El Ceibo, la familia Senzano se especializó en la elaboración de recuerdos con rellenos de coco, maní, pasas y licores de diferentes sabores.

Durante la celebración de eventos, la empresa familiar se encarga del decorado del ambiente, la atención personalizada, la cristalería y de todos los detalles necesarios para degustar chocolate en todas sus formas.

Para la temporada primavera-verano, “Divino Chocoland” ensaya un nuevo producto. Se trata del helado de crema bañado en chocolate que viene con chispitas, coco, maní, galletas, mieles de colores y encima chocolate blanco.

PERFIL

Personal

Nombre: María Cristina Senzano

Nacimiento: El 19 de agosto de 1980 en Cochabamba

Estado civil: Casada con Marcelo Aramayo, tiene una hija

Profesión: Licenciada en Arquitectura de la UMSS en 2003. Es presidenta de la Asociación de Chocolate Artesanal de Cochabamba.

Laboral



Gerente de la empresa familiar “Divino Chocoland”, dedicada a la producción de chocolate artesanal, brochetas de frutas bañadas en chocolate, paletas y bombones rellenos para todo tipo de acontecimiento social. Senzano trabaja con sus papás Jaime y Cristina y sus hermanas Estefanía y Vivian.

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