Diez pequeños productores integrantes de la Cámara Agropecuaria del departamento de Tarija trabajan en la producción de chinchilla, con la finalidad de mejorar sus ingresos económicos a través de la exportación de pieles.
La reproducción de la chinchilla lleva mucho tiempo, a decir del gerente de la Cámara Agropecuaria, Esteban Miranda, sin embargo, una vez que se logra una cantidad “considerable”, se puede extraer las pieles que valen entre 20 y 40 dólares.
Cada uno de los 10 socios cuenta ya con más de 20 chinchillas. Algunos de ellos ya tienen hasta 200. Una vez que lleguen a tener poco más de 300 de esos animales se empezará a sacar las pieles para exportarlas a Argentina.
Miranda indicó que es necesario que se sumen más socios al proyecto para que se logre mayor cantidad de pieles de un mismo color. Informó que se buscará financiamiento para ese fin, a través de una cooperativa con la que están trabajando desde hace algunos años.
Entre los años 2002 y 2004, por otra parte, la Cámara Agropecuaria hizo un convenio con una institución productora de chinchilla en Jujuy, en el cual se establecía que los productores de esos animales en Argentina, les enseñarían las técnicas de crianza a los emprendedores bolivianos y les dotarían de alimentos para sus animales. Por su parte, los productores bolivianos deberían ser los que exporten las pieles de chinchilla hasta ese país.
La Cámara Agropecuaria, en esos años, buscó financiamiento para 56 de sus socios, para que se dediquen a la producción de chinchilla, sin embargo sólo se consiguió para 10 de sus miembros, sin embargo ahora hay la posibilidad de conseguir créditos para ese fin.
Cada hembra tiene tres pariciones al año. La gestación es de 111 días. Cada una de ellas come entre 25 a 30 gramos al día. Una Chinchilla viva cuesta 200 dólares.
En la Feria EXPOSUR, por otra parte, se exhibió prendas con pieles de chinchillas que se producen en el departamento, según el Gerente de la Cámara Agropecuaria, pero la mayoría fueron hechas con pieles de animales producidos en Argentina. En el desfile de modas vistieron pendas con la piel de chinchilla, y se demostró que es un atractivo, a decir de Miranda, por tanto animó a que se siga produciendo ya que hay una “gran demanda” internacional de las pieles de esos animales.
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