domingo, 26 de julio de 2015

Tejedoras afirman que no es fácil abrirse mercados Menonitas consumen el 50% de tejidos de Paurito

Sentada en una silla de plástico la señora Luisa Moreno se esmera para dar los últimos toques a las decenas de sombreros que produce junto a sus tres hijas y su sobrina.

El material debe estar listo cada quince días, que es el tiempo en el que sus clientes, en su mayoría menonitas, llegan para recoger los pedidos que serán transportados a las colonias extranjeras donde llegarán transformados y adaptados a las vestimentas de estas culturas.

Con un poco de creatividad y la incrustación de nuevos accesorios y aplicaciones los menonitas se han convertido en el principal mercado que nutre el comercio de tejidos que produce este municipio, ubicado a 15 kilómetros de la capital cruceña.

Fusionan sus culturas y su producción. "Nosotros hacemos el trabajo duro y ellos le ponen su sello. Sería injusto decir que ellos están matando nuestra producción; por el contrario, la están alimentando, ya que las ventas que se hacen en el mercado interno no son las mejores y además se reducen a temporadas específicas", señala la anciana de 88 años.

"Yo empecé a tejer a mis ocho años y debo decir que en los últimos años han mejorado las ventas gracias a la promoción de nuestro trabajo y también por iniciativas como estas que llegan a absorber hasta el 80% de la producción de algunas familias", dice la mujer, pues afirma que no todas las tejedoras pueden abrirse al mercado menonita que exige un tejido más fino en los accesorios.
"El trabajo es espléndido, es por eso que muchos menonitas optamos por comprar aunque debemos hacer un trabajo aparte para poder usarlos porque de esta manera no son apetecidos", señaló Jacobo Xiesbmecht, quien se abastece cada 15 días de las artesanías cruceñas.

Mercado. Se estima que cada mes esta población de emigrantes viabilizan la producción de al menos 600 sombreros, cantidad que para las tejedoras resulta un número significativo tomando en cuenta que la producción de sus artesanías están orientadas a la promoción y comercialización de accesorios de tipo cultural o turísticos, como sombreros, hamacas, muñecos, colitas y otros enseres para decorar los ambientes de la casa.

Así funciona la economía en Paurito

Reserva. El área protegida de la palmera de saó, ubicada a 30 kilómetros de la capital cruceña, en la comunidad Tundy, la principal fuente de abastecimiento con una extensión de más de 578 hectáreas de saó que es preservada por la Gobernación cruceña.

Materia prima. Cada día productores y comunarios se trasladan hasta la reserva donde sacan una cantidad determinada de palmas que son limitadas por la Gobernación para la preservación de la reserva. Cada amarro cuesta entre los Bs 2 o Bs 3.

Tejedoras. Se estima que hay alrededor de 100 mujeres de las localidades de Paurito y Tundy que conforman la red de tejedoras de saó de este municipio, pues se estima que este oficio es el principal motor económico y el sustento del 80% de las familias del lugar.

Producción. Cada familia produce hasta 100 sombreros diarios en temporada alta, aunque afirman que no es un comercio que esté en repunte todo el año, la ganadería y el comercio es otro de los principales motivos de ingreso en esta comunidad.

Promoción. La Gobernación y la Alcaldía realizan gestiones para el comercio de artesanías y tejidos, aunque la ayuda no es la suficiente para potenciar su mercado. Cada año se realiza una versión de la feria de saó que promociona la producción.

Comercio
Mercados, ferias y el agro copan el mercado en el departamento

Si bien el mercado menonita concentra una parte de la producción de artesanías que produce Paurito, hay otro sector de artesanos que opta por nutrir de las bondades del saó en los mercados capitalinos, que consume otra importante cantidad de sombreros, canastos, llaveros y otros enseres que producen en este sector de la ciudad.

"Los mejores meses son agosto, septiembre, octubre y noviembre que es donde florece más lo cruceño", señala Inés Campos, de 36 años, quien también destaca la demanda que hay del mercado agrónomo del departamento que demanda los denominados sombreros troperos para la zafra.

No hay comentarios:

Publicar un comentario