Hace algunos días me detuve a analizar la importancia de varios
emprendimientos que se hicieron realidad en nuestro medio y de otros que
están en pleno desarrollo y que tienen base en el sector agropecuario.
Por llamarlo de alguna manera, son los agroemprendimientos relacionados
con el campo y que están no muy alejados de los sectores tradicionales.
Se hacen infraestructuras para industrializar carne, se construyen laboratorios para producir semen y difundir genéticas de cerdo, una profesional veterinaria presenta una nueva técnica de inseminación artificial, se invierte en tecnología de precisión en la agricultura, eso por mencionar algunos, pero todos buscan apuntalar a la principal activividad que tiene Santa Cruz, que su base está en el campo y en la producción de alimentos.
Para ellos, desde aquí un aplauso y ustedes imaginariamente pueden adherirse con palmas, porque esa gente que toma iniciativa, está dotada de fuerte dosis de creatividad e imaginación y que sin duda se animó a romper con lo convencional, pasando los límites de lo conocido, de lo que existe, para encarar en algunos casos, novedosos y en otros originales emprendimientos, pensando en la región y en el país. Porque más allá de su esfuerzo, son generadores de empleo y por ende contribuyen al bienestar de la población.
No es que exista un boom de emprendimientos, pero nacen muchos y se desarrollan, seguramente porque el país pasa por un buen momento en su economía, o porque es visualizada por emprendedores, que en realidad también son personajes que buscan darle valor agregado al esfuerzo de los que trabajan haciendo producir la tierra.
La idea es gratificar la creatividad de empresarios que muestran capacidad para lograr resultados diferentes, explorando nuevos nichos de mercado, pero teniendo en cuenta que los clientes potenciales están muy cerca, están en la ciudad, están en Bolivia
Se hacen infraestructuras para industrializar carne, se construyen laboratorios para producir semen y difundir genéticas de cerdo, una profesional veterinaria presenta una nueva técnica de inseminación artificial, se invierte en tecnología de precisión en la agricultura, eso por mencionar algunos, pero todos buscan apuntalar a la principal activividad que tiene Santa Cruz, que su base está en el campo y en la producción de alimentos.
Para ellos, desde aquí un aplauso y ustedes imaginariamente pueden adherirse con palmas, porque esa gente que toma iniciativa, está dotada de fuerte dosis de creatividad e imaginación y que sin duda se animó a romper con lo convencional, pasando los límites de lo conocido, de lo que existe, para encarar en algunos casos, novedosos y en otros originales emprendimientos, pensando en la región y en el país. Porque más allá de su esfuerzo, son generadores de empleo y por ende contribuyen al bienestar de la población.
No es que exista un boom de emprendimientos, pero nacen muchos y se desarrollan, seguramente porque el país pasa por un buen momento en su economía, o porque es visualizada por emprendedores, que en realidad también son personajes que buscan darle valor agregado al esfuerzo de los que trabajan haciendo producir la tierra.
La idea es gratificar la creatividad de empresarios que muestran capacidad para lograr resultados diferentes, explorando nuevos nichos de mercado, pero teniendo en cuenta que los clientes potenciales están muy cerca, están en la ciudad, están en Bolivia
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