La salida de materia prima por la vía legal y de contrabando a Brasil y Paraguay, provocaría el cierre de talleres de carpintería, alertaron los dirigentes del Consejo Central de Federaciones y Asociaciones de Artesanos de El Alto (Cocedal), y de la Federación de Trabajadores en Madera (Fatma), por lo que exigen al Gobierno mayor control en las fronteras para garantizar la materia prima a favor del mercado interno.
La dirigencia de Cocedal lamenta que la materia prima que salía del sector de los Yungas o llegaba de Cochabamba, ahora se destina sin ninguna restricción a otros países, por vía el contrabando.
“El 50% de los artesanos del departamento de La Paz, están a punto de cerrar los talleres, por falta de materia prima. La dirigencia en varias oportunidades dejó saber a las autoridades de gobierno la salida de troncas vía contrabando, pero a la fecha no se ha aplicado ninguna política preventiva o de control”, indicó a EL DIARIO, Miguel Escóbar, ejecutivo de la organización.
La organización responsable de elaborar muebles con la sigla Fatma, al momento habría generado el despido de 30% de sus operarios en los talleres, quienes no pueden cumplir con la demanda de muebles, ante la falta de madera.
“Hemos pedido una audiencia a la Ministra de Desarrollo Productivo Antonia Rodríguez, para dar a conocer las demandas y problemas por los cuales nos estamos declarando en estado de emergencia, ante la falta de madera y la falta de planificación, aspecto que indirectamente favorece al contrabando de muebles Chinos”, denunció.
Para los artesanos en madera lamentan que la falta de materia prima y el ingreso de muebles vía contrabando, pueda despedir a más de 10.000 trabajadores artesanos, quienes ofrecen empleo indirecto y directo de más de 100.000 personas con sus familias en el departamento de La Paz.
CONTRABANDO
Los artesanos en productos de madera al momento sólo trabajan con troncas de roble, cedro, laurel y hasta el uso de la madera Ochoca, la cual no es propicia para la confección de muebles por ser más delgada, mientras se extingue la madera mara, la cual se vende al Brasil.
“La escasez se ha registrado desde hace cuatro años, pero en las tres últimas semanas la problemática ha recrudecido porque no llegan los camiones de madera y sólo han entregando medio camión a los artesanos, quedando el 50% de los productores sin trabajo y anulando contratos”, explicó.
El Norte yungueño sería la región por donde se observa la salida diaria de más de 30 camiones con troncas de madera, las cuales no son decomisadas por la total ausencia del control en las fronteras por parte de las instituciones públicas conminadas, de acuerdo a la Constitución Política del Estado (CPE), a cumplir esa función.
“Dentro del 50% de madera que está llegando, la misma es de tercera calidad por lo que estamos trabajando, con baja calidad, mientras que el contrabando de muebles que llega a mercado interno de China, son muebles denominados tropanes, que es cartón prensado, que ocupa ilegalmente sin pagar impuestos la demanda de la población”, afirmó Escobar.
La declaratoria de emergencia por parte del sector podría generar medidas de presión en las próximas horas frente al eminente cierre de talleres.
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